DPNG y ABG investigan muerte de iguanas marinas en Tortuga Bay

El Ministerio del Ambiente a través de la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) y la Agencia de Regulación y Control de Bioseguridad y Cuarentena para Galápagos (ABG) estudian las causas de la muerte de 14 iguanas marinas en el sector de Tortuga Bay, sitio en el que se está monitoreando intensivamente la población de iguanas y las condiciones ambientales del sitio.
El reporte realizado el sábado 7 de septiembre por un cazador, sobre la presencia de algunas iguanas marinas muertas, en el sector Las Palmas, ubicado al oeste de la isla Santa Cruz, movilizó a los guardaparques, que determinaron que los individuos estaban en avanzado estado de descomposición.
Al día siguiente fue detectado el primer caso de una iguana muerta en Tortuga Bay, además de un individuo que evidenciaba necesidad de vomitar. Los expertos de la DPNG y la ABG no han determinado si existe relación con el caso de Las Palmas.
Desde inicios de la presente semana, la DPNG movilizó un equipo de monitoreo al sitio, donde fueron encontrados otros seis machos muertos. Como medida inicial, se procedió a cerrar el acceso a la colonia de iguanas en Tortuga Bay; además se revisó el estado de salud de los individuos de este sector que registra una población de 775 individuos vivos.
Veterinarios y biólogos de la ABG y la DPNG realizaron la necropsia de los individuos muertos, los que presentan la mayoría de sus órganos en buen estado, sin embargo se evidenciaron estómagos llenos de algas verdes y rojas con prevalencia incrementada en las rojas, así como también inflamación y hemorragia en el intestino delgado.
Washington Tapia, responsable de investigación aplicada de la DPNG, precisó que aún no se conoce con precisión la causa de las muertes, pero se evidenció un problema digestivo. Análisis realizados al agua permitieron descartar contaminación por combustibles o químicos en el sitio. Hasta el momento, las posibilidades apuntan a un problema de tipo natural.
Los estudios continúan con el apoyo de científicos de instituciones aliadas, especialistas en iguanas marinas y enfermedades de reptiles, para implementar acciones de remediación.