Hoy, el Presidente de la República, Rafael Correa, informó sobre la decisión del Gobierno Nacional de utilizar responsablemente los recursos del Yasuní, con el fin de obtener más ingresos económicos destinados a la inversión social en los sectores más vulnerables del país, al igual que para impulsar el cambio de matriz productiva.

A pesar de los grandes esfuerzos del Gobierno Ecuatoriano en dejar bajo tierra el crudo del Yasuní (para conservar íntegra su biodiversidad), el Primer Mandatario aseguró que la erradicación de la pobreza en el país es impostergable y que al no tener una corresponsabilidad de los demás países, el proyecto no se pudo consolidar.

Pero asimismo, el Presidente Correa afirmó que el Estado consecuente con el compromiso de protección ambiental garantizará que cualquier exploración o extracción de recursos se realice con la mayor responsabilidad y mediante las tecnologías más sofisticadas y menos agresivas.

El actual modelo económico y productivo del Ecuador tiende a volverse más respetuoso con el medio ambiente. Los recursos obtenidos del proyecto Yasuní ITT o del aprovechamiento de los recursos naturales serán invertidos en proyectos ambientales y de desarrollo social. “Nuestra prioridad no es el capital sino el bienestar de las personas desde la cosmovisión del Sumak Kausay estipulado en el Plan Nacional del Buen Vivir”, expresó el Jefe de Estado.

El Estado ecuatoriano ejercerá de forma eficaz y eficiente la rectoría de la gestión ambiental, lo cual garantiza una relación armónica entre los ejes económicos, social, y ambiental que asegurará el manejo sostenible de los recursos naturales estratégicos.

El Ministerio del Ambiente, como principal Autoridad Ambiental, velará por cumplimiento de estrictos y modernos planes de protección del medio ambiente para cualquier actividad extractiva.